Uno de cada cinco aparatos consume más electricidad que la que revela su etiqueta energética que, precisamente, la UE va a simplificar este año.
Los expertos estiman que cada año se pierden en Europa más de 10.000 millones de euros en ahorro energético debido al incumplimiento por parte de los fabricantes y vendedores de las normas de la UE. Esta circunstancia «se ‘come’ parte de los 465 euros de ahorro medio prometido en la factura energética a cada hogar europeo por las directivas de ecodiseño y etiquetado energético», añaden los responsables de MarketWatch.